Lobos sí, ataques de lobos no
¡Qué viene el lobo!
¡Qué venga, qué venga! ¡...en Xanceda estamos preparados!
Tras varios y continuos ataques de lobo, por fin, en Casa Grande de Xanceda las vacas pueden dormir tranquilas.
En 2008 tuvimos muchísimos ataques de lobos
Los lobos, no solo nos mataron a 12 vacas, sino que también causaron estrés en todo el rebaño, causando abortos y una bajada dramática en la producción de leche.
Nuestra Responsabilidad Social Corporativa es importante para nosotros a todos los niveles y desde nuestros comienzos asumimos un importante compromiso medioambiental, de desarrollo sostenible y bienestar animal. ¡Por ello adoptamos métodos alternativos para acabar con los ataques del lobo!
El primer paso que dimos fue llamar a las principales asociaciones de protección del lobo. ¡Quién mejor que los expertos en lobos para aconsejarnos! De su asesoramiento surgió la idea de proteger a nuestras vacas con perros de la raza mastín y de cerrar nuestro prado con vallas de tres metros de altura.
Así que nos pusimos manos a la obra y recorrimos varias perreras en busca de mastines que necesitasen una segunda oportunidad. Así le dimos un nuevo hogar a varios perros y ellos nos lo agradecieron con su instinto innato: ¡la protección del ganado!.
Nuestros simpáticos mastines se llaman Tristán, Isolda, Avellana, Sil, y Filloa
Una de las aventureras de Casa Grande de Xanceda, Cristina, propuso una idea innovadora y curiosa. Ella había estado de voluntaria en una organización de protección de animales carnívoros en Namibia y ahí había vivido una situación parecida siendo en ese caso leopardos y guepardos los que atacaban al ganado. De ahí surgió la primera idea de integrar burras jóvenes con las vacas.
Las burras una vez se acostumbran a estar con el ganado protegen a las vacas como si de su propia familia se tratase. Con sus grandes orejas detectan posibles ataques mucho antes que las vacas y rebuznan alertando así de la presencia del lobo y poniendo sobre aviso a vacas y mastines.
Este método alternativo también se utiliza en los Alpes Suízos en donde también tienen en la actualidad problemas con los lobos. De esta forma no sólo se protege al ganado sino que también se le da una nueva función a los burros que se encuentran al borde de la extinción en nuestro país.
Nuestros burros guardavacas se llaman “Valentina" y “Junior”.
¿Sabías que los burros están en peligro de extinción? Tanto que por no estar ¡no están ni en WhatsApp! ¡Vaya Burrada! Hemos querido solucionarlo y por eso hemos puesto en marcha una iniciativa solidaria para conseguirlo: Vaya Burrada
Todas estas medidas “alternativas” tienen un elevado coste pero en nuestro caso prevalece el compromiso de convivencia con la fauna autóctona y el medio ambiente, y, por supuesto, el bienestar de nuestras vacas más que el aspecto económico.
¡Y desde entonces nuestras vacas vivieron felices y comieros perdices.... bueno..., hierba!